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Foto vía @dodgers

Qué importa si termina siendo un trato de solo un año antes de firmar un contrato millonario con los Yankees o alguien más. Qué importa si hubo que añadir un contrato gigante que tomó la forma de David Price para hacerlo posible.

Qué importa si en el camino hubo que perder al mexicano Alex Verdugo para conseguirlo.

Este acuerdo para obtener a Mookie Betts tenía que suceder… y si para que sucediera había que hacer algunos sacrificios, ¡pues adelante!

Atrás ha quedado toda esa inacción administrativa que vimos en el invierno, cuando los Dodgers no firmaron a estrellas como Cole, Strasburg y Rendón. Después de tal tibieza, la noticia de que Betts y Price llegarán a LA es impactante, un intercambio realmente vertiginoso, dado que Verdugo irá a Boston, Maeda a Minnesota y Joc Pedersen a los Angels.

Lo más importante de todo esto, es que parece que finalmente se romperá la maldición que cayó sobre los Dodgers en 1988, cuando ganaron la Serie Mundial por última vez.

Artículo traducido por Gabriela Enríquez