
Dani Alves habla una vez más, en un intento desesperado por su libertad

El caso en contra de Dani Alves por presunta violación sexual va de mal en peor para el ex futbolista brasileño, que apenas se estaba acomodando en Pumas de la Liga MX. El caso se ha visto marcado por las constantes contradicciones del acusado.
En un inicio, Alves dijo que no había ni cruzado palabra con la víctima. Después reconoció felación y después reconoció penetración. En lo único en lo que el brasileño se ha mantenido constante es en que el acto fue siempre consensuado y no hubo abuso.
Nuevamente Alves declaró ante las autoridades de Barcelona, con la esperanza de que le permitan la libertad bajo fianza misma que le han negado en varias ocasiones. Como pretexto ante sus previas contradicciones, el ex futbolista alegó que lo hizo con el fin de proteger su matrimonio con Joana Sanz.
De nada funcionó. Sanz pidió el divorcio y el caso de Alves sólo se complicó más.
Para justificarse, además, el brasileño alegó que la acusación en su contra podría ser resultado de que lastimó los sentimientos de la víctima al no tratarla con más atención. Según él, por esta razón lo habría acusado de violación.
Aunque el cuerpo médico no encontró indicios de abuso en la víctima, el caso en contra de Alves es fuerte. Él mismo se ha encargado de ponerse en una situación de culpable.
Por lo pronto, ya cumple 3 meses en la cárcel española y no parece que vaya a salir próximamente.