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Tengo que empezar esta opinión aclarando que soy fan de los Baltimore Ravens, y que Lamar Jackson llegó como la gran promesa que nos llevaría a ganar el próximo Super Bowl. Sin embargo, claramente esto no ha sucedido y ahora tanto Lamar como los Ravens están estancados en una relación que no lleva a ninguna parte.

Varios equipos han mostrado algo de interés por Jackson (Minnesota Vikings, New England Patriots, incluso los Tennessee Titans). Y sinceramente, lo mejor que le puede pasar tanto al jugador como al equipo es que sus caminos se separen.

Los Ravens demostraron que no necesitan a Lamar para avanzar hacia playoffs. Aunque la temporada no terminó bien para los de Baltimore, tampoco fue mucho peor que antes de que se lesionara su QB.

Por otro lado, vimos a Lamar cometer error tras error. Esto solo me hace pensar que no tiene el equipo de coaches necesarios para aprovechar su talento y ajustar al equipo alrededor de su juego.

Esto solo nos deja con una clara alternativa. Que Lamar encuentre un nuevo equipo donde sepan aprovechar sus habilidades y la estrategia gire alrededor de ellas. Y que Ravens aproveche las negociaciones para hacerse de talento nuevo en el draft y promover un nuevo camino hacia el futuro.

Eso sí, duele pensar en la separación de nuestro MVP.